“Contento y sorprendido”. Así es como ha aterrizado en España el madrileño Eduardo Uceda después de ser el único deportista nacional en lograr dos medallas en los Campeonatos del Mundo disputados recientemente en Kobe (Japón), en lo que ha sido, sin ningún género de dudas, la antesala y el aperitivo de los próximos Juegos de París.
“Es que la verdad es que hay muchísimo nivel, pero mucho. Es algo espectacular”, cuenta a Yo Soy Noticia el velocista, que muestra ambición e ilusión a partes iguales después de haber cumplido más que de sobra este primer objetivo de la temporada.
Confiesa que solamente pensaba en “hacerlo lo mejor posible” allí, pero se ha traído sus dos primeras medallas de talla mundial, ya que tenía continentales, pero todavía no había podido pisar un podio mundial o paralímpico, aunque en Tokio 2020 acabó en el quinto lugar.
“Intentaba no pensar en las medallas, aunque por ránking estaba bien posicionado. Se han alineado los astros”
Se viene con una plata y un bronce y ahora toca pensar en París 2024, aunque de momento mantiene los pies en el suelo. “A ver, yo espero que me ratifiquen la plaza porque con estas dos medallas creo que sí que iré. Gerard (Descarrega) está lesionado y también hay que ver cómo llega, pero es lo que digo, que pueden pasar muchas cosas y, lo que tengo claro, es que si no voy seguiré luchando y no me voy a comer más la cabeza”
De Kobe... a París
Lo que sí ha sido este campeonato para él es un extra de confianza de cara al futuro. “Es que a mí me decían todo el rato que tenía que conseguir una medalla para ir a los Juegos. La realidad es que he tenido muchísima presión y todo el rato pensaba en si no lo hacía bien, y más viniendo de una lesión, pero por suerte todo ha salido a la perfección”.
“Creo que los Juegos es otro mundo, pero se empieza por aquí”
Habla de sus opciones de medalla allí porque sabe que los rivales van a ser prácticamente los mismos. “En estos mundiales ha faltado un francés y luego Gerard, pero los demás estaban todos. Y yo quiero que en los Juegos estén todos porque quiero luchar contra los mejores del mundo”.
Así que su carta de presentación es inmejorable y, por eso, si está en París lo estará con la medalla en la cabeza. “El objetivo de partida será el de intentar estar en el podio, pero siempre siendo realistas para que no llegue un tortazo grande”
Recuerda la experiencia en Tokio, que fueron los Juegos de la pandemia. “Mira, en mi caso, gracias a que los retrasaron un año me pude clasificar"
“Fue una experiencia muy buena, pero en la parcela deportiva no me fue muy bien. Perdí la semifinal y me quedé sin opciones de pelear por las medallas”
Por todo eso, nos confiesa que ahora mismo está en una nube con estos dos metales. “Es lo que te digo, que todavía no me lo creo”, insiste en el mensaje. “Yo creo que me llegan los Juegos en un gran momento. Es verdad”.
Y aunque todo esto lo ha conseguido gracias a su trabajo, es perfectamente consciente de que no hubiese sido posible sin el equipo que trabaja junto a él. Se deshace en elogios hacia su guía Diego Folgado, quien es para él algo más que la persona junto a la que corre. "Él es mis ojos en la pista, pero también es mi luz. Es un amigo y alguien muy importante en el aspecto mental".
Además, no se olvida de la tercera pata que lo equilibra todo, Juanjo Morgado, su entrenador. "Es otra persona importantísima en todo este proceso"
Confía en el equipo de atletismo paralímpico, pero sabe que las cosas en los Juegos son complicadas. “Ojalá compañeros como Kim López o Iván Cano puedan conseguir una medalla, o el mismo Gerard, aunque en su caso es más complicado por el tema de la lesión. Él es un crack, espero que llegue lo mejor posible, pero a ver cómo está”
También reconoce que le hace “mucha más ilusión París que Tokio”, por muchas cosas. No tiene nada que ver y una de las cosas que más agradezco es el horario. “Me costó muchísimo adaptarme en Tokio, me notaba cansado todo el rato. Sentía el cuerpo reventado. Es una cosa que a mí me gusta mucho y eso repercute en el rendimiento”
La música, su “gran pasión”
Y si ha llegado hasta dónde ha llegado en el atletismo adaptado es, en parte, por la música, su otra gran pasión. Se le ilumina la cara al hablar de ello. “Es algo que me encanta, la verdad”.
“Estoy en un grupo, en la escuela Enclave Madrid, en una escuela de música, y nos lleva Javi Díez, exteclista de Mago de Oz”, continúa explicando.
“Nos llamamos Juan Tumbao, hacemos versiones de otros grupos y todos nos vamos cambiando. Somos unos virtuosos y yo me lo paso muy bien”
No tiene ninguna duda de la influencia tan positiva que la música ejerce sobre su atletismo. “Me ha ayudado a conseguir todo lo que he conseguido. Yo siempre lo he unido porque necesito la música. Pero hasta el punto de que me he llevado a Japón la flauta travesera. Para mí es esencial para mí”