Nombres como los de Roberto Laiseka, Iban Mayo, Samuel Sánchez, Haimar Zubeldia… Son historia del ciclismo español, del Tour de Francia, de la Vuelta a España. Cuando uno echa la vista atrás no tarda nada en recordar estos nombres asociados a esas cunetas de aficionados abriendo paso a los corredores, con cientos de seguidores vestidos de naranja, animando a los muchos ciclistas vascos que han escrito grandes historias en las carreteras europeas.
Los ejemplos más recientes los tenemos en Pello Bilbao y Mikel Landa, sin embargo, por debajo de ellos sigue habiendo una cantera que no deja de sacar nuevos talentos que tratan de abrirse paso en el ciclismo profesional, un mundo cada día más globalizado y donde ganarse un sitio es realmente complicado.
Jon Agirre, enamorado del ‘naranja’
Jon Agirre forma parte de ese tipo de ciclista que trata de consolidarse en el pelotón nacional. Nacido en Zumaia, en Gipuzkoa, en el año 1997, el corredor ha firmado por el equipo Euskaltel-Euskadi para las dos próximas temporadas, por lo que asegura su presencia entre los mejores ciclistas del mundo para 2025 y 2026.
Y es que Agirre ya es un corredor curtido en algunas de las mejores carreras nacionales, puesto que ha pasado los últimos cinco años vistiendo el maillot del equipo Kern Pharma, ese conjunto que ha encumbrado a la figura de Pablo Castrillo en la última Vuelta a España, con esos dos triunfos de etapa memorables.
“Formar parte del equipo Euskaltel-Euskadi es un sueño hecho realidad”
Lo tiene claro un ciclista que se forjó en la mencionada cantera vasca y que tuvo que salir y firmar por los navarros para ir creciendo como ciclista, ya que de esos cinco años, ya ha pasado los últimos cuatro en la élite, donde ha cosechado algunos resultados de cierto relumbrón. De hecho, en esta última temporada que acaba de cerrarse ha sumado tres Top 5 en la Volta a Portugal, en la que acabó décimo segundo en la general, completando una magnífica carrera en el país vecino.
Ya anteriormente había dejado su firma en otras pruebas importantes; en 2023 acabó octavo en el Tour de Langkawi y décimo en el Tour de la República Checa, resultados que avalan a un ciclista que se fue formando en los equipos Parking Geltokia (2016), Eulen (2017) y Baqué (2018 y 2019) y en su último año sub23 ganó la Montaña en el Tour del Porvenir.
“Euskaltel es el equipo que hemos visto desde que éramos niños, con esas cunetas de naranja y siempre has pensado que querías formar parte de eso”
Aprovechar la oportunidad
Así que, teniendo en cuenta todo esto, está deseando ponerse un dorsal y empezar a competir con el equipo con el que siempre ha querido hacerlo, desde que era un aficionado hasta ahora que es un ciclista profesional. “Ahora tengo la oportunidad de estar aquí y espero aprovecharla”, ha contado en unas declaraciones facilitadas por su propio equipo.
Aunque no habla de objetivos claros y concisos como tal, lo primero en lo que piensa es “en devolver la confianza” que el equipo Euskaltel ha depositado en él. “Sobre todo quiero disfrutar de vestir de naranja en las carreras de casa”
“Espero poder dar mi mejor versión para que los aficionados puedan disfrutar, y así mostrarles nuestro agradecimiento porque siempre nos apoyan”
Jorge Azanza, responsable deportivo del Euskaltel-Euskadi también lo tiene claro: "Agirre es un escalador puro, del estilo de Bizkarra, y que no ha llegado a su techo. Estoy convencido de que lo va a conseguir con el equipo porque ha ido en progresión en estos últimos años. Estoy seguro que el paso definitivo lo va a dar aquí y va a tener todo nuestro apoyo en cuanto a calendario y confianza en él".