Antía Jácome se plantó en los Juegos de París como una de las grandes esperanzas de medalla de la delegación española. Venía de completar un ciclo fantástico, con preseas europeas y mundiales y muchas de las miradas se centraron en ella y en su canoa, sin embargo, en un deporte como el piragüismo en el que todo se decide por centésimas esta vez la suerte no cayó de su lado y se tuvo que conformar con un cuarto puesto en su prueba individual y un sexto en el C-2 haciendo dupla con María Corbera.

Es verdad que fui a los Juegos con la mentalidad de estar peleando en las medallas”, empieza contando a Yo Soy Noticia la deportista española, quien, un mes después de aquel momento, todavía recuerda perfectamente. “El día que acabamos sextas en el C-2 fue un palo bastante duro. Fue complicado porque era una buena opción, pero las condiciones meteorológicas tampoco nos ayudaron, así que nos quedamos con esa espina clavada”, va relatando.

“Voy a seguir luchando”

Tuvo que recomponerse rápido porque apenas 24 horas después tenía que disputar su prueba individual, donde también tenía opciones de pelear por todo. “Creo que me recompuse bien y rápido y fui capaz de dar mi 100% en la prueba individual”, cuenta sobre ese cuarto puesto. Por apenas un suspiro se quedó sin la medalla, así que se marchó con un cuarto y un sexto que une al quinto logrado en Tokio cuando apenas había cumplido poco más de 20 años.

“Hay tan poca diferencia de unas a otras que cualquier pequeño detalle marca la diferencia entre estar en una medalla o en un cuarto puesto”

Explica que la evolución del piragüismo en los últimos años está siendo muy notable. “Se están batiendo récords que llevaban mucho tiempo ahí. Se está dando un salto muy grande y yo estoy ahí en ese salto, pero esta vez no me ha dado para conseguir una medalla. El deporte es un poco así; hay veces que trabajas mucho por estar en una medalla y no sale y es lo que me ocurrió esta vez, pero tengo claro que voy a seguir luchando para que acabe saliendo”.

Tras su brillante ciclo olímpico en Europeos y Mundiales, Antía Jácome extrae la conclusión de que hay países que en el año preolímpico no están tan fuertes porque lo preparan así. “Cada país lo hace de una forma. Por ejemplo, Estados Unidos venía de hacer tres años muy malos, pero es algo que hicieron a propósito así. Igual tenemos que hacer un planteamiento diferente, no lo sé. Yo confío mucho en mi entrenador, Quico Martín, pero igual toca hacer algunos ajustes, que sean para mejor”.

“Igual no hay que estar tan bien en el año preolímpico y enfocarse más para llegar mejor preparados a los Juegos”

Más allá de la competición, en París ha vivido unos Juegos muy diferentes a los de Tokio. “Aquí ha estado mi familia y ha sido algo increíble en ese aspecto. Me hubiese gustado mucho poder subirme al podio con ellos en la grada, pero como decía antes, vamos a seguir trabajando para poder conseguirlo algún día”

Con ganas de más

Ahora se encuentra en un periodo de descanso que durará “hasta principios de octubre” más o menos. “Nos viene bien este periodo de descanso”, cuenta alguien que está “con ganas de seguir”, aunque reconoce que tras acabar los Juegos se sentía “bastante saturada

Pero toca mirar al futuro y hacerlo con el mayor de los optimismos. “Tengo ganas de seguir entrenando y compitiendo… Es verdad que fui a París con el objetivo de las medallas y, aunque no se dio, sé que estoy a un pasito y hay que seguir ahí y seguir luchando por ello. Soy una persona que siempre ha pensado que todo pasa por algo, así que vamos a intentar lograr ese resultado tan bonito en otros Juegos, pero soy consciente de que las medallas olímpicas están muy caras”

Son unas palabras que demuestran el enorme trabajo mental que también hay en Antía Jácome, algo para lo que una deportista como ella se prepara tanto o más que para lo que luego hace dentro de la canoa. “Soy consciente de que me dedico a lo que me dedico. Es un deporte que lleva mucha preparación y una parte muy importante es el aspecto mental”, sigue contando.

“Hay que tener la cabeza preparada para los momentos de máxima presión. En competición juega un papel fundamental y hay que llegar a ese día con el trabajo hecho”

Por eso cuenta que ha estado tres años trabajando muy bien esa parte, por eso razona que a los Juegos de París llegó en un momento de forma excelente a todos los niveles. “Si acabé cuarta es porque no tenía nada más dentro de mí”.

Jácome es minuciosa con toda la parcela deportiva porque es su “trabajo”, algo que tiene muy claro. Y es por eso por lo que lleva tan bien todo el tema de las redes sociales, porque quiere “fortalecer” su marca personal “para el día de mañana. Creo que lo voy consiguiendo poco a poco”. Eso sí, también apunta a que lo que enseña es solamente la parte deportiva porque la vida privada debe ser para ella y para su entorno. “Me gusta que la gente conozca lo que hacemos porque luego parece que sacas un cuarto puesto y no has hecho nada. Y la realidad es que hay mucho trabajo detrás”.

La medallitis es algo que no se puede dejar de lado cuando llegan unos Juegos Olímpicos porque es lo que más llama la atención de la gente y es algo que ella ha comprobado más que nunca en esta cita de París 2024. “Se han vendido mucho las medallas en piragüismo durante estos tres últimos años y parece que es que hubiera que conseguirla sí o sí. A mí se me dijo que iba a ganar dos medallas y la realidad es que es algo muy complicado”.

Recuerda cuando salió de las dos competiciones y veía tristeza en la cara de los periodistas. “Sé que ellos hacen también un esfuerzo grande por estar ahí, por contar lo que conseguimos en los Juegos y antes de los Juegos, pero la realidad es que es muy difícil ganar una medalla. Sabía que podía estar con las mejores y lo he estado, pero me he quedado cuarta”.

Un nuevo ciclo olímpico

Con todo esto en su cabeza, su planteamiento de cara al próximo ciclo olímpico que acabará en Los Ángeles 2028 es el mismo. “En principio la idea es seguir como hasta ahora, con María Corbera en el C-2 y con mi prueba individual”, dice

“Ella y yo somos personas diferentes, pero nos entendemos muy bien porque confiamos mucho la una en la otra”

Ambas han demostrado ser las dos mejores canoístas de España y, por eso, Jácome está convenida de que “ningún otro barco” funcionaria tan bien como este. “En cualquier caso, como he dicho antes, igual hay que hacer algunos ajustes en el tema de la preparación para buscar un mejor rendimiento, pero no me gustaría cambiar nada de lo de más. Es algo que hablaré con mi entrenador, pero el punto de partida es este