El crecimiento exponencial del rugby en los últimos es innegable, especialmente en una Comunidad Valenciana que cada vez tiene más licencias y se le quedan cortos los recursos que tiene a su disposición. Especialmente instalaciones deportivas idóneas.
En el presente reportaje vamos a abordar en profundidad una de sus modalidades: el Rugby Seven. Aunque en los últimos años ha cogido una fuerza brutal, la realidad es que lleva asentado entre nosotros muchísimo tiempo. Pero todavía no ha tocado techo ni muchísimo menos.
El presente es prometedor, el futuro más si cabe. En Yosoynoticia.es hemos querido hablar con el valenciano Matías Tudela, capitán de la Selección Española en los JJOO de Río de Janeiro. Una voz más que autorizada para hablar de la modalidad olímpica.
Particularidades Rugby Seven
Nos estamos acostumbrando a que con el transcurso del tiempo haya más jóvenes promesas de nuestro rugby que se aventuren en la modalidad olímpica. Un escenario motivado según Matías porque «las Series Mundiales, donde hemos conseguido el mejor resultado de la historia, están dando mucho juego».
«El Rugby Seven es un deporte que enamora, tiene unos factores atléticos que suponen correr muchísimo y seducen. Es más llamativo, más vistoso, y al ser olímpico atrae más a los jugadores. Enamora», apunta.
Mismo terreno de juego, pero con menos de la mitad de jugadores que Rugby XV. Un aspecto que por un lado convierte esta modalidad olímpica en más vistosa, como ha comentado Matías, pero que por otro lado delimita el perfil de jugador.
«Al ser menos y el terreno a cubrir el mismo, las facultades que tiene que tener un jugador se notan más. Puedes ser muy fuerte pero puedes sufrir mucho. Un tío rápido en Rugby Sevens destaca más y facilita mucho el juego», subraya.
Así pues, mientras «todo el mundo» puede jugar en Rugby XV, sólo unos pocos elegidos tienen las aptitudes necesarias para formarse en Rugby Seven. Matías, quien conoce las dos a la perfección, terminó decantándose por la modalidad olímpica por el amplio abanico de posibilidades que le ofrecía.
El boom de los torneos de verano
El pico de participación de Rugby Seven llega en los meses de verano. La temporada de Rugby XV ha llegado a su fin y los jugadores aprovechan ese parón para comenzar a preparar la pretemporada con los diferentes torneos que tienen lugar.
En la actualidad, se solapan una multiplicidad de torneos, algo que era impensable hace unos años. «Hay torneos por todos los sitios, ya no sólo a nivel de Valencia y de la Comunidad Valenciana sino a nivel nacional. Ahora tienes que elegir porque hay muchos, eso no ocurría antes», señala.
Un escenario muy halagüeño que tiene todavía mucho margen de mejora. «Creo que tendrá un auge progresivo. Las Series Mundiales han favorecido a esto peor todavía queda mucho por hacer y ver», incide.
Las tres patas de la mesa
¿Por qué tantos jugadores eligen probar el Rugby Seven? ¿Es por ser una modalidad olímpica? ¿O hay algo más? Matías Tudela considera que hay «tres patas de la mesa» que explican el auge de participación en los últimos tiempos.
En primer lugar, y como no puede ser de otra manera, la posibilidad de jugar unos JJOO. Un factor que fue decisivo en el caso del propio Matías, como él mismo reconoce: «Cuando jugaba en ambas decidí quedarme con el Rugby Seven porque el factor olímpico tira mucho».
En segundo lugar, por la excelente preparación física que conforma de cara a una nueva temporada. «El vacío de que acabe la Liga de Rugby XV, ese parón, se aprovecha porque somos unos enamorados del rugby y no podemos parar. Es una especie de pretemporada».
En tercer y último lugar, porque los torneos de Rugby Seven suponen un negocio, se obtiene de los diferentes torneos un rédito económico. «El club que lo organiza saca beneficios, por eso hay tantos. Pero a la vez fomenta la práctica y por ello salen mejores jugadores porque están más rodados».
Rugby XV y Rugby 7: ¿Compatibles?
¿Podría suceder en un futuro que una modalidad de rugby absorba a otra? Es decir, que se apueste tanto por una que la otra acabe perdiendo relevancia de forma paulatina. ¿O es impensable y ambas pueden convivir de manera conjunta? Matías Tudela lo tiene claro.
«No creo que ocurra la absorción. Aunque en España no se vea porque estamos obcecados con el fútbol el Rugby XV es el gran gigante a nivel mundial. Mueve unos números increíbles, por lo que nunca será competencia el Rugby 7. Son complementarias», apostilla.
Jóvenes promesas
La Comunidad Valenciana es prolífica a la hora de dar a conocer nuevos talentos, jugadores con muchísimo potencial que se integran cada vez más en los combinados nacionales. Sin embargo, la ausencia de un equipo en la élite provoca que muchos tengan que emigrar en busca de un futuro profesional.
Por ello, aunque es irrefutable el gran trabajo que están haciendo las escuelas valencianas es insuficiente. La solución para Matías pasa por «terminar de cuajar respecto a las categorías superiores y tener un equipo en la élite».
«Tenemos niños con mucha calidad pero se desvanece al no haber un equipo en División de Honor que garantice la continuidad tras los 18 años. No se limitan a jugar en una Segunda División y se van a Madrid o a países como Francia o Inglaterra», lamenta.
Una fuga de cerebros de la que se aprovechan numerosas academias que absorben a este tipo de chavales con cualidades para terminar de formarlos y así obtener beneficios. Una situación que hay que cambiar con la mayor presteza.
«Estamos a años luz porque esas camadas de calidad emergente que tenemos se nos van. Tenemos que cuidarlas y hacerlo de la misma manera, para que no se vayan y se queden aquí», sentencia.