La jugadora valenciana de baloncesto, Montserrat Brotons, jugará esta próxima temporada en el Kutxabank Araski de Vitoria, club que participa en la Liga Femenina Endesa, al igual que su anterior equipo, el Cadí La Seu de La Seu d'Urgell. La pivot de 25 años vivirá su primera temporada en el País Vasco después de dos años en el norte de Cataluña, el último casi todo parado por lesión.

Todo empezó el pasado mes de septiembre, cuando Montse se lesionó el tendón rotuliano de la rodilla izquierda. Una lesión que, aparentemente, era para ocho semanas, se acabó convirtiendo en una auténtica pesadilla que la tuvo fuera de las canchas de baloncesto hasta el mes de marzo. Al final de la temporada recibió el alta médica, pero no obtuvo el alta deportiva, lo que la mantuvo alejada del baloncesto todo el año.

La deportista de Cocentaina ha compartido con Yosoynoticia.es su difícil experiencia tras dicha dolencia. Durante todo el verano, ha trabajado intensamente para recuperar la masa muscular y la fuerza perdida. Aunque se sentía bien en su equipo anterior, en La Seu, la gestión de su lesión no fue la mejor y decidió marcharse, sintiendo que algo no estaba funcionando como deseaba.

“Fueron momentos muy complejos. Estaba un poco desesperada y en crisis porque no sabía qué hacer para mejorar y sintiendo que nadie me podía ayudar. Por suerte pude evitar el quirófano. Se me había formado un gran nódulo y la cirugía era muy agresiva, con solo 30% de éxito y no parecía lo más indicado. Al final encontré a un fisioterapeuta y un readaptador aquí en Torrent que habían tratado lesiones como la mía y me devolvieron la confianza”, explica Montse Brotons.

Con la lesión te das cuenta de que es lo esencial y es disfrutar. A mí me hace feliz la sensación de jugar al baloncesto y eso es lo que me mueve

Poco a poco, su sistema nervioso se fue calmando y, con el trabajo diario, comenzó a recuperar sensaciones como deportista y jugadora de baloncesto. Ahora afrontará una nueva oportunidad en la LF Endesa, una de las mejores ligas europeas, donde tendrá que demostrar que la lesión quedó en el olvido. El Araski es el balón de oxígeno que necesitaba.

“Estoy muy tranquila aquí. Con la lesión te das cuenta de que es lo esencial y es disfrutar. A mí me hace feliz la sensación de jugar al baloncesto y eso es lo que me mueve. Creo que este año tenemos muy buen equipo y queremos estar en la parte media-alta de la tabla. El primer objetivo es salvarnos y luego disfrutar y ver dónde llegamos”, asegura la contestana de 25 años, que cumple 26 el día 16 de septiembre.

Una pretemporada en ciernes

No ha sido hasta esta semana cuando Montse se ha incorporado al trabajo con el Kutxabank Araski. El lunes fueron las revisiones médicas y ya han comenzado los entrenamientos. Por delante, seis partidos de pretemporada para llegar al máximo nivel a la LF Endesa y luchar partido a partido. Se encuentra ante un año clave en el que debe recuperar su nivel si las lesiones le respetan.

Será un año importante para mí. Debo demostrar que pueden confiar en mí dentro de la cancha

“Tenemos mucha garra y mucha hambre de ganar. Será un año importante para mí. Debo demostrar que pueden confiar en mí dentro de la cancha. Devolver la confianza depositada y disfrutar, que es lo que estoy haciendo estos primeros días. El grupo es muy bueno y muy competitivo, creo que podemos hacer un gran año y estar en el Top10”, finaliza Montse Brotons.