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Juan Ángel Perdigón, entrenador del Levante Balonmano Marni femenino: "Ha sido una temporada muy rara"

Publicado el 18/04/2025 a las 18:49

Hacía ya más de un año que no pulsábamos la actualidad de esta institución referente en el balonmano de nuestra ciudad. Hoy comprobaremos que, en muchos aspectos, la vida sigue igual. Pero que lo que hemos vivido en los últimos meses a raíz de la DANA ha dejado huella, por azares del destino y de muy diversas formas, especialmente en algunos lugares como este.

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Juan Ángel Perdigón lleva toda la vida vinculado a esta auténtica escuela del balonmano valenciano que para él es una verdadera familia. Como toda persona vinculada al deporte no renuncia a soñar, pero tras cuatro temporadas en el cargo conoce de sobra cuales son las limitaciones y la naturaleza de la entidad de la cual es director técnico:

“Seguimos en división de honor plata, nuestra dinámica nos hace complicado pensar en ascender. Somos un club amateur que se nutre de su base y de su escuela, lo que hace difícil ir mucho más allá. El año pasado quedamos cuartas y este sextas. Iniciamos bien la temporada pero luego ya vimos que no podíamos alcanzar los objetivos y entonces inevitablemente bajó la motivación, lo que ha hecho que el tramo final de temporada nos haya costado un poco más.

Somos de los pocos clubs amateur al 100 % de la categoría, nuestras jugadoras no cobran y por tanto no podemos competir con otros equipos que sí pagan y pueden fichar por ejemplo jugadoras uruguayas, argentinas o colombianas. En nuestro grupo competimos con 11 equipos catalanes y 3 de aquí, y casi todos pueden permitirse fichar y pagar. Nosotros tenemos que tirar de cantera, de gente que venga a estudiar o que gracias a nuestro buen nombre en el balonmano quiera venir a jugar con nosotras”, nos dice.

"Somos de los pocos clubs amateur al 100 % de la categoría, nuestras jugadoras no cobran y por tanto no podemos competir con otros equipos que sí pagan. Tenemos que tirar de cantera, de gente que venga a estudiar o que gracias a nuestro buen nombre en el balonmano quiera venir a jugar con nosotras. Se hace complicado pensar en ascender"

Ubicado en la tercera categoría del balonmano nacional, el Levante Marni conoce cuales son sus pilares esenciales y así nos lo expresa el también entrenador del equipo senior femenino:

“Sobre todo y al margen de las legítimas aspiraciones deportivas, hay que poner en valor el trabajo de escuela que realizamos. Somos un club de 350 deportistas y 24 equipos, la mitad masculinos y la mitad femeninos. Eso hay que nutrirlo de entrenadores y en ese sentido somos también un gran lugar de formación: la mayoría han sido jugadores nuestros, muchos se jubilan aquí tras toda una vida.

A nivel jugadoras, hemos tenido muchas que se han ido a equipos de más entidad, tenemos asumido como algo normal que se lleven a las mejores y que ellas quieran progresar, pero lo vivimos con más orgullo que resignación, sabemos cual es nuestro lugar. Por ejemplo este año Ariadna Zanón ha sido internacional junior y lo ha hecho muy bien, ha ido a todas las convocatorias y tiene muchas opciones de ir este verano al mundial. También han destacado en la temporada otras jugadoras de la casa como Raquel Beltrán o Estela Ballesteros", afirma Perdigón.

“Sobre todo y al margen de las legítimas aspiraciones deportivas, hay que poner en valor el trabajo de escuela que realizamos. Tenemos asumido como algo normal que se lleven a las mejores y que ellas quieran progresar, pero lo vivimos con más orgullo que resignación, sabemos cual es nuestro lugar"

Precisamente Estela Ballesteros, capitana del equipo a sus 21 años tras seis en el club y cinco en el equipo plata, nos aporta también su punto de vista sobre la temporada que acaba de llegar a su fin y la dinámica del club:

“Empezamos fuerte y con muchas ganas pero luego nos costó engancharnos a la competición como sí sucedió el año pasado, especialmente en los partidos de fuera. En casa nos fue bien, habíamos perdido muy pocos puntos, pero los parones por la DANA nos hicieron perder el ritmo de entrenamientos y partidos y poco a poco nos alejamos del objetivo de al menos mejorar los resultados del año pasado.

Estudio fisioterapia y entreno al equipo cadete femenino, con el que este año vamos a ir al autonómico. Es muy difícil conciliar deporte y otras facetas de la vida, muchas veces entrenas a las 9 de la noche, hasta que te bajan las revoluciones a la 1 igual no te duermes y a las 8 de la mañana tienes clase. Pero bueno, hacemos esto porque disfrutamos. El Marni es uno de los mejores clubs a nivel deportivo y también familiar, esto es una verdadera escuela a todos los niveles, hay muy buena dinámica y estamos muy unidos”, declara.

“Los parones por la DANA nos hicieron perder el ritmo de entrenamientos y partidos y poco a poco nos alejamos del objetivo de al menos mejorar los resultados del año pasado. Es muy difícil conciliar deporte y otras facetas de la vida. El Marni es uno de los mejores clubs a nivel deportivo y también familiar, estamos muy unidos"

A nivel de apoyos económicos todo sigue igual en un club que continúa haciendo encaje de bolillos para seguir adelante de la mejor manera con lo que tiene:

“Seguimos con el patrocinio de Teika, nos echan una mano pero todo lo demás es autofinanciación. La relación que tenemos con el Levante U.D es más sentimental que económica, y además ya sabemos la situación en la que está el Levante... deportivamente las cosas les van bien pero su economía ahora mismo es la que es. Hubo una época en que cuando nos teníamos que trasladar a nivel nacional a veces nos ponían el autobús, pese a todo, para el presupuesto que manejan nosotros somos insignificantes, no debemos representar ni un tercio de su sección de fútbol sala. Pero bueno sabemos cual es nuestro tamaño y nuestro tope. 

Y sigo diciendo lo mismo que la última vez, es muy difícil que te hagan caso en una capital con los deportes minoritarios. La mayoría se están yendo a capitales de provincia pequeñas como Jaén, Nava, Aranda del Duero, o Puerto de Sagunto. Es más fácil despuntar allí porque en esos sitios hay menos competencia deportiva y además en poblaciones de menor importancia apuestan más por poner su nombre a nivel nacional. Aquí lo copa todo el fútbol y el basket. Es complicado”, detalla el entrenador.

“La relación que tenemos con el Levante U.D es más sentimental que económica, y además ya sabemos la situación en la que está el Levante... deportivamente las cosas les van bien pero su economía ahora mismo es la que es. Es muy difícil que te hagan caso en una capital con los deportes minoritarios"

Y para terminar Juan Ángel Perdigón nos da otra clave de la temporada que nos hace ver como el efecto mariposa se hace notar en múltiples aspectos de nuestras vidas todos los días, en este caso con respecto a las consecuencias y a la larga sombra de una DANA que todavía sigue muy presente en muchos ámbitos y que al Balonmano Marni le afectó de un modo tan inesperado como atípico:

“Este año ha sido extrañísimo con el tema de la DANA. Por fortuna aquí en Valencia capital al final no pasó casi nada, pero las jugadoras de localidades como Alcàsser, Paiporta o Torrent durante un tiempo no pudieron venir con normalidad a los entrenamientos. Debido a esos cortes y cierres durante la temporada no hemos logrado continuidad. Tras la DANA hubo que parar del todo dos semanas y la competición se vio afectada. Luego, al tener que recuperar esas jornadas, te tenías que desplazar a Cataluña y jugar el mismo fin de semana dos partidos, con la dificultad añadida que eso supone, no estábamos preparadas para eso.

Además está lo tristemente ocurrido con José Luis Marín. Era patrono del Levante y director del colegio Marni. Cuando ascendimos con el equipo de chicos a categoría nacional, hizo las gestiones para que desde 2014 el Levante nos diera su apoyo y cariño. Obviamente era alguien muy importante y querido aquí. Bueno, pues José Luis Marín fue uno de los que murió en la famosa comida de empresarios durante la DANA, junto a Antonio Noblejas del EDEM, Miguel Burdeos de Bosque Verde y Vicente Tarancón, el fundador de Luanvi. Se conocían de toda la vida, jugaban juntos al golf y hasta compartieron coches aquel aciago día. Como es lógico, eso también nos afectó. Ha sido una temporada muy rara”, concluye.

“José Luis Marín era patrono del Levante, director del colegio Marni y muy querido aquí. Fue uno de los que murió en la famosa comida de empresarios durante la DANA, Como es lógico, eso también nos afectó. Ha sido una temporada muy rara”

Esperamos de todo corazón que la próxima vez que actualicemos el estado de este clásico de nuestro balonmano las circunstancias hayan sido mejores. Nos consta que al menos pueden sortear las vicisitudes del camino abrigados por el buen hacer de lo cotidiano y la firmeza de sus convicciones.

Carlos de Narea

Carlos de Narea

Redactor YSN.

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